El piano es un instrumento muy completo que todo músico debería dominar, porque nos muestra en sus teclas blancas y negras cómo organizamos la música en la actualidad.
Si bien podemos identificar su origen en la música clásica, hoy la escuchamos en diversos estilos, ya que este instrumento se adapta fácilmente y sus posibilidades (sobre todo cuando logramos independencia entre ambas manos) se vuelven infinitas.
Aunque se puede ver un poco intimidante al comienzo, te sorprenderás de los que puedes lograr en pocas clases.
Ejercicios Técnicos: Ejercicios para desarrollar la musculatura de los dedos y obtener control de cada nota en cada tecla. Generalmente acompañados de un metrónomo logramos un sonido limpio y seguro. Más que extrema agilidad, se logra que cada nota suene con peso y presición.
Teoría: Escalas, acordes, armonía, enlaces, grados, rítmica básica y avanzada, para que entiendas la lógica de la música. Aprenderás a leer partituras y clave americana.
Repertorio: Aprenderás cómo todo lo anterior lo puedes aplicar a las canciones que siempre quisiste tocar y a darle tu toque personal. También a improvisar e, incluso, componer tus propias canciones.